YA!!! La Navidad pasó, el Año Nuevo también, los atracones y los excesos y en parte, los propósitos del 2011 ya están medio olvidados y como no iba a ser menos, nuestro corazón sigue a la suya.
Nos negamos cosas el día 1 de Enero, juramos que cambiaríamos, que no volveríamos a caer en errores o vicios nocivos pero bueno, ahí estamos, cayendo de nuevo, equivocándonos y no pudiendo olvidar a depende que personas y/o cosas.
Hay cosas que no pueden reprimirse o esconderse, supongo que sabéis que hablo de los sentimientos, los impulsos...ese algo interno que no nos deja actuar de una manera racional. Podrán pasar meses, años, siglos si es necesario pero quizá en tu mente ronde ese "por qué", esas imágines imborrables, ese sentimiento que no se esfumó pero que tampoco ha vuelto a renacer...
Cada mañana me pongo tiritas que me quito antes de irme a dormir: mi pelo alborotado lo disfrazo para que caiga negro y liso, cubro mis ojos con sombras de colores y rimmel, me visto para protegerme...pero realmente son eso, sólo tiritas, parches para que no se hagan más grandes las heridas que hay debajo pero, detrás de esas máscaras hay alguien que mirándose al espejo mientras se enmascara, se pregunta cada mañana "por qué", alguien que busca un nuevo destino, que lidia con la soledad y que llora en silencio y sin lágrimas...
No quiero quitarme mis tiritas, no, para no sentirme desprotegida. No quiero que las heridas crezcan, no quiero mostrar mis cicatrices. Yo conozco donde están y lidio con ellas, forman parte de mí, solamente ellas y yo. Mi vida y yo, ya tengo suficiente con ello...y el 2011? un año más; objetivo? primordialmente laboral, me he marcado un objetivo y voy a luchar con todas mis fuerzas para conseguirlo, va a ser mío, no puedo caer.
