viernes, 5 de noviembre de 2010

Tráfico


Si nos paramos a pensar, la vida es muchas veces comparable a una carretera o autopista: tramos rápidos, con tráfico, accidentes, curvas, bajadas, pendientes, con áreas de descanso, etc. Nos gusta viajar en coche y disfrutar del paisaje pero si hay mucho tráfico nos agobiamos y más cuando llevamos tiempo paraditos dentro del coche. Lo mismo nos pasa cuando nos sentimos estancados en nuestra vida...


Miramos a nuestro alrededor y vemos que, lógicamente, todo evoluciona. La gente que conocemos, nuestros amigos, familia, etc,., siguen con sus vidas adelante y parece que ellos nunca pillen atascos o semáforos en rojo y entonces decimos: "vaya mierda de carretera! la mía siempre va a tope", lo que transcrito a la vida es: ellos evolucionan en un sentido del que tú estás carente: viajes, mudanzas, parejas, hijos, experiencias que parecen emocionantes, etc., pero tú decidiste coger la carretera con más movimiento de todas y eso hizo que el tráfico te parara durante largas horas.


De ahí muchas veces salen los complejos Peter Pan y Campanilla ( no quieres crecer y en parte, tampoco puedes porque las circusntancias no ayudan), las fustraciones (por qué los demás sí y tú no?) y la tristeza al verte o sentierte menor, en un sentido o campo en la vida, que las personas que te rodean pero, qué se puede hacer? pienso que NADA, seguir viviendo e intentar ser lo menos infeliz posible aunque hay días horribles en los que mandarías todo al carajo. Sientas lo que sientas y aunque te estanques, la vida seguirá pasando y quizá a ti te haya tocado una vida insípida sin emociones fuertes, una vida lineal, monótona y hasta cierto punto aburrida en la que no habrá suspiros por amor, personas por las que preocuparse o planes excitantes tramados con ilusión.


Ya lo decía la canción "la vida es una tómbola..." y te puede tocar cualquier cosa tanto si te gusta como si no; la tómbola no pregunta y la vida menos aún.

1 comentario:

Mireia de Lorenzo dijo...

Lo que está claro es una cosa, nadie ha de decidir qué tipo de vida has de seguir, y nadie sabe el camino correcto para "tu" vida, excepto tú...